Silfos nocturnos, fuegos fatuos y comerrocas, una tortuga gigante, un monstruo proteico y un dragón de la suerte, oráculos y esfinges, hombres lobo, brujas y vampiros, tres niños (una emperatriz, un héroe y un lector apasionado), y muchas otras criaturas fantásticas, hacen de La historia interminable un impulso para soñar y viajar.
Es también un texto que estimula el pensamiento. ¿Me acompañas a desentrañar sus tesoros filosóficos?
La esperanza como superación del nihilismo
En La Vetusta Morla (tercer capítulo de La historia interminable) Atreyu se interna en la Gran Búsqueda y recorre fantásticas regiones en las que habitan mágicos árboles que cantan al crecer, personas que capturan la luz de las estrellas, seres con cuerpo de fuego, hombres “que nacen viejos y mueren cuando son bebés” (Ende, 2022, p. 62). En el bosque de Haule se enfrenta por primera vez a la Nada y en el Pantano de la Tristeza pierde a su fiel amigo Ártax. Finalmente, se encuentra con la Vetusta Morla, quien ha vivido tanto que sólo percibe sinsentido y desesperanza.
Además de la historia, que es fascinante, el Capítulo III aborda varios tópicos filosóficos: la relevancia y el poder de los nombres, la existencia al margen del tiempo, la tristeza y la desesperanza, el carácter de la Nada, la relatividad, el sentido de la vida, etc. En esta cuarta entrega de La filosofía interminable de Ende, nos sumergiremos en dicho apartado para reflexionar en torno al sinsentido de la existencia humana.
Recurriendo a potentes imágenes y símbolos, Michael Ende retoma el tema de la Nada. Reconoce que hablar de ella es un contrasentido pues, como asentó Parménides, “a la nada no le es posible ser” (Parménides, 2008, p. 309). Así pues, aunque entiende que es extraño “decir que la nada aumenta” (Ende, 2022, p. 63), de alguna manera ésta crece con la aniquilación. La describe como algo que en realidad no se ve, “no era un lugar pelado, una zona oscura, ni tampoco una clara; era algo insoportable para los ojos y que producía la sensación de haberse quedado uno ciego” (Ende, 2022, p. 64).
A pesar de su irrealidad, el contacto con la Nada tiene efectos: “no se siente nada. Sólo te falta algo y cada día te falta algo más” (Ende, 2022, p. 63), hasta que dejas de existir. Además, posee un poder de atracción irresistible.
No se trata sólo de un problema ontológico sino de una preocupación antropológica. La intuición de la Nada puede inclinarnos a la tristeza, la desesperación e incluso el suicidio. Una de las partes más desgarradoras de la historia es cuando Ártax, el caballo parlante de Atreyu y su fiel compañero, muere en el Pantano de la tristeza: empieza por hundirse un poco, considera que deben volver, que no tiene sentido perseguir “algo que sólo has soñado” (Ende, 2022, p. 67); conforme avanza se siente enfermo, “la tristeza de mi corazón aumenta. Ya no tengo esperanzas, señor. Y me siento cansado, tan cansado… Creo que no puedo más” (Ende, 2022, p. 67), hasta que, sin resistencia, abraza la muerte. Lo más terrible es que Atreyu no puede hacer nada para salvar a su amigo.
En el diálogo con la Vetusta Morla, una tortuga que ha vivido eones, se profundiza la cuestión. La anciana explica que su larga experiencia le permite comprender que “nada tiene importancia… Todo da lo mismo, exactamente lo mismo” (Ende, 2022, p. 70). En sintonía con el Eclesiastés que declara: “¡Esto no tiene sentido, nada a qué aferrarse!… Una generación se va y viene la otra… El sol sale, el sol se pone… lo que pasará es lo que ya pasó, y todo lo que se hará ha sido ya hecho” (Ecles. 1, 2-9); la tortuga explica: “todo se repite eternamente: el día y la noche, el verano y el invierno…, el mundo está vacío y no tiene sentido. Todo se mueve en círculos. Lo que aparece debe desaparecer, y lo que nace debe morir” (Ende,2022, p. 70-71).
Esta postura no es solo nihilista sino también relativista, escéptica y pesimista: “Todo pasa: el bien y el mal, la estupidez y la sabiduría, la belleza y la fealdad. Todo está vacío. Nada es verdad. Nada es importante” (Ende, 2022, p. 71), “si fueras tan viejo como nosotras sabrías que no hay más que tristeza” (Ende, 2022, p. 71).
De manera radical se sugiere, haciendo un guiño al existencialismo, que la Nada nos rodea. Sin embargo, “Atreyu recurrió a toda su fuerza de voluntad para contrarrestar el entumecimiento que le producía la mirada de la Vetusta Morla” (Ende, 2022, p. 71). Entonces se sobrepone y grita: “no es verdad que todo te dé lo mismo ¡Ni siquiera tú crees lo que dices!” (Ende, 2022, p. 71)
En esta entrega no abordamos todas las cuestiones filosóficas que se tocan en el Capítulo III de La historia interminable. Ya habrá ocasión para hablar de ellas. Pero hemos mostrado un interesante acercamiento al problema ontológico y antropológico de la Nada que propone superar la depresión y la inmovilidad con la fantasía y la esperanza.
Referencias.
Ende, Michael (2022). La historia interminable. Alfaguara.
Eclesiastés (2002), en La Biblia (2002). Editorial Verbo Divino.
Parménides (2008). Fragmentos, en Eggers Lan, Conrado (2008). Los filósofos presocráticos. Gredos.
Crédito ilustración de la entrada: «Duelo en el valle» por Yami Hernández @yamiherdez