JUSTIFICACIÓN

Es imperativa la necesidad de generar una identidad cultural propia respecto a las temáticas de fantasía, ciencia ficción, terror y horror; ya que hasta ahora su producción y consumo ha sido principalmente extranjero. Más importante ante la creciente globalización y acaparamiento de las grandes corporaciones internacionales que buscan homologar el discurso solo con fines comerciales, y en ese sentido, empobrecerlo. Por ello se busca la diversidad de discurso en la manifestación artística en estas temáticas y fomentar la creatividad que estas categorías conllevan. Así se procura el pensamiento crítico y mejora la capacidad de consumo de los individuos que permitirá un mejor abordaje de los problemas sociales y su entendimiento.

Tanto mejor se comprende el discurso de lo consumido, más se comprende el valor del arte en general y se puede tomar decisiones para mejorar la calidad de vida. También, se busca garantizar las oportunidades de que la literatura, su aprendizaje, entendimiento y disfrute, sean asequibles a cualquier miembro de la sociedad. Hemos decidido abordar los géneros o categorías literarias de ciencia ficción, fantasía, horror y terror; porque muchas veces han sido vituperados como “sub-géneros” o “categorías menores” a la gran literatura. Ya sea porque se les acusa de ser “escapistas” o porque mucha de su producción, toma argumentos extraños o temas marginales. Ello no resta importancia a esta manifestación artística en cada época y región.

En palabras de Ursula K. Leguin, “El Futuro, en la ficción, no suele ser más que un modo de mirar el Presente”¹. Así se resalta que la fantasía y la ciencia ficción no sólo es una perspectiva diferente o trastocada de nuestra realidad; esta transfiguración, permite ver más allá de lo cotidiano o normal, provocando el pensamiento analítico y crítico. También introduciendo en el imaginario colectivo, palabras o conceptos que expanden nuestro entendimiento de la realidad y sociedad misma, que posiblemente más tarde formarán parte del léxico de la cotidianidad. Antes quién hubiera pensado que el internet y los algoritmos reemplazarían a la radio y televisión, hasta Giovanni Sartori en el “Homo Videns” dudaba de ello.

Hoy más que nunca: “El futuro es ahora”. Pero no solo se trata de futurismo, también de fomentar la capacidad de imaginar realidades alternativas y evidenciar las injusticias o absurdos de nuestra actual sociedad. Los también llamados, géneros de ficción especulativa, permiten abordar temas prohibidos o considerados tabú por la moral actual o política dominante.

Creemos que la sociedad mexicana, necesita producir, conocer, divulgar y disfrutar su propia producción fantástica como parte de un proceso de decolonización y reafirmación cultural regional. La importancia de la difusión de estas temáticas creativas radica en que, —hasta hace unos años—, hay quienes dudaban siquiera de la existencia de la literatura de fantasía y ciencia ficción en México.

Ahora es cada vez más evidente que ya se cuenta con escritores y artistas gráficos que abordan estos temas con seriedad y compromiso. Aún en la precariedad que ofrece el agreste mercado o la insuficiencia de políticas gubernamentales; la producción de estas obras persiste principalmente por la autopublicación, blogs, revistas y fanzines electrónicos o proyectos editoriales independientes.

En el fanzine eletrónico Delfos se abordan dos ámbitos específicos: la narrativa gráfica y la narrativa en prosa, concretadas en las formas de ilustración y cuento.